Las cocinas no encienden desde hace dos semanas. Ingeniárselas para preparar las tres comidas del día se convirtió en costumbre para las amas de casa en el oeste de la ciudad. Están preparadas con bombonas, carbón o cocinas eléctricas, ya que las fallas en el suministro de gas por tubería son continuas. Solo 24 horas duró el servicio, que desde ayer vuelve a estar ausente en las viviendas marabinas.
Los habitantes del barrio Bolívar, La Chamarreta, las cuatro etapas de Altos de la Vanega, Altos del Sol Amada, María Angélica Lusinchi, el sector San Rafael, los bloques de Raúl Leoni, urbanización Richmond, Pradera Alta, Pradera Baja y Pomona son lo más afectados por la problemática.
La explosión ocurrida el pasado 9 de octubre en el gasoducto Antonio Ricaurte, en Colombia, cerca de la población de Maicao, es la causa de la falla. Ese gasoducto provee gas a las diferentes plantas de generación ubicadas en el occidente venezolano. Según una fuente de La Verdad, la Corporación Eléctrica de Venezuela (Corpoelec) activó un plan de contingencia que saca gas desde El Tablazo para la ciudad y las termoeléctricas para que no falle el servicio eléctrico.
Reyes Ríos, presidente del Servicio Autónomo para el Suministro de Gas e Infraestructura (Sagás), informó que el servicio no se ha terminado de restablecer por completo, ya que las presiones de gas son bajas por el incidente en Colombia. "PDVSA Gas, que es la responsable del suministro doméstico, debe estar equilibrando la línea con las presiones. Es un trabajo de balanceo de estaciones. En el punto de Altos de La Vanega no debe estar en más en ocho libras y debería estar entre 29 y 30 para dar un buen servicio".
Olga Ballesteros, habitante de la urbanización Altos de la Vanega, comentó que desde hace más de una semana se vio en la necesidad de comprar una cocina eléctrica por la constante falta en el servicio.
“Estamos en crisis. Casi todos los días es el mismo cuento, si tenemos gas es muy poco, o como en este caso, tiene días sin llegar. Los vecinos estamos preparados con bombonas y cocinas eléctricas. Este problema tiene años y el Sagás no responde a las solicitudes”.
En Sabaneta
El problema también afecta a los habitantes de Sabaneta. Tienen más de cinco años sin recibir gas por tubería. Carmen Fuenmayor, residente de la urbanización Urdaneta, en la parroquia Cecilio Acosta, comentó que tiene que utilizar con mayor frecuencia sus tostadoras, licuadoras y hornos portátiles para ahorrar el gas de la bombona, pero eso incrementa la tarifa eléctrica mensual y las multas por alto consumo.
"Estamos en crisis. Este problema tiene años y nadie nos da respuesta. Ya los vecinos estamos acostumbrados, pero el uso de los artefactos eléctricos y las recargas continuas de gas desajustan el presupuesto".
Ríos aseguró que el problema se debe al cambio de lugar de las tuberías que suministran gas en Sabaneta, cuando se construyó el Metro de Maracaibo. “Los trabajadores del Metro cambiaron las tuberías que alimentan esa zona y colocaron unas de tres pulgadas. En varias ocasiones les hemos pedido que nos informen dónde están, pero no obtenemos respuesta".
Este rotativo intentó comunicarse con Rafael Colmenárez, presidente del Metro, para corroborar la información, pero no fue posible el contacto.
Tomas ilegales
Reyes Ríos, presidente del Servicio Autónomo para el Suministro de Gas e Infraestructura (Sagás), informó recientemente que existe una cantidad alarmante de tomas ilegales de gas en la zona oeste de la ciudad.
“Entre 50 mil y 60 mil viviendas de las casas del oeste de Maracaibo están conectadas ilegalmente. Por lo general utilizan mangueras para agua; cuando estas se agrietan, son remendadas con teipe. Las malas uniones ocasionan que se filtre agua en las tuberías, generando un costo adicional al municipio”.
Fuente: http://goo.gl/xEAumE
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